HISTORIA DE LA DOCUMENTACIÓN
Quisiera empezar diciendo cual es el significado etimológico de la palabra “DOCUMENTACIÓN”.:
“La documentación es la acción o efecto de documentar”. Partiendo de éste significado aparentemente escueto empezamos a analizar más profundamente el sentido que esta palabra tiene en si y cómo ha sido capaz de cambiar la vida a millones de personas.
Profundizando en el porqué de las cosas nos encontramos entre tantas definiciones y tantas teorías al filósofo español Jesús Mosterín, una persona que está a caballo entre la ciencia y la filosofía discerniendo o desgranando con una aplastante racionalidad en sus juicios el sentido de la propia vida.
Mosterín nos habla de que los seres vivos superiores cuentan con dos sistemas primordiales de almacenamiento de información: La genética y la almacenada en el cerebro. Como bien sabemos la información genética es la que se transmite mediante un proceso lento pero altamente eficaz porque es la que almacena las características principales de un ser y la otra forma, la que todos conocemos es a través del cerebro, más rápida, pero más inestable a la hora de conservar esa información. A partir de aquí podemos decir que en la historia del ser humano se han ido produciendo avances paulatinos para conseguir que esa información guardada en el cerebro permanezca inalterable y se pueda transmitir sin errores; es aquí cuando entra a formar parte con una notoriedad abrumadora la palabra DOCUMENTACIÓN.
Nos remontamos en el tiempo a miles de años atrás y empezamos a comprender que la documentación ya formaba parte de los primeros seres humanos. Cuando dibujaban figuras en las paredes de las cuevas, cuando tallaban huesos, cuando en árboles y rocas marcaban sus signos, cuando empezaron a transcribir sus ideas y sus contabilidad en tablillas de arcilla o pergaminos, etc. Ahí empieza verdaderamente la documentación.
Pero el ser humano en su afán de tener control sobre las cosas y en este caso también controlar toda la información y el saber guardado en los libros, no para de investigar en la forma de hacer más accesibles esos conocimientos a las personas que los buscan o demandan.
Ya en el siglo XVI se empiezan a incrementar las tareas bibliográficas a nivel universal y es por tanto una necesidad para las personas de esa época el tener una forma rápida y sencilla de acceder a esa información. Las bibliotecas se van haciendo más grandes ya no solo con los manuscritos de antes del siglo XV, sino con libros que van apareciendo con la invención de la imprenta y normalmente es complicado buscar determinados libros. Es en la segunda mitad de este siglo cuando el bibliólogo Hernando Colón realiza una serie de viajes con el objeto de ir clasificando todo lo que se está haciendo.
En el siglo XIX el periodismo científico tiene un auge espectacular, las primeras revistas farmacéuticas, catálogos de ciencia, miles de publicaciones que se almacenan con poco control y que son difícilmente recuperables con el paso de los años ya que no se dispone de un sistema de localización.
Es sobre finales del siglo XIX, cuando un bibliotecario americano llamado Melvil Dewey inventa el Sistema Decimal Universal, un sistema para clasificar libros en la biblioteca del colegio y que sería el inicio de una verdadera revolución en cuanto a la organización de las bibliotecas.
Su sistema consistía en que el número asignado no indicaba el emplazamiento de los libros en los estantes, sino que respondía a la relación de las materias entre sí, haciendo que los números asignados a una disciplina sean decimales, por lo que cada nueva cifra que se añade es una subdivisión de la anterior. Ello permite en principio un sinfín de subdivisiones, si es necesario, sin alternar el orden previamente establecido.
http://t.co/wjWG1jbRPosteriormente los abogados belgas Paul Otlet y Henrí La Fontaine toman el descubrimiento de Dewey para crear un instrumento que permita tener acceso a todo el mundo a la información y son los primeros orígenes de lo que hoy conocemos como Internet. Desgraciadamente en aquellos años no se disponía de la tecnología suficiente para dar vida a ese invento.
http://t.co/4A9BaNC4A principios y mediados del siglo XX, siguen apareciendo personas que desarrollan en progresión geométrica la aparición de herramientas y soportes con los que se crea mayor accesibilidad hacia la información: Otlet/La Fontaine; desarrollan el proyecto del Repertorio Bibliográfico Universal. Donker Duyvis muestra un gran interés por la fotorreproducción. Woorhoeve/Van der Brugghen; con la ampliación de comisiones técnicas y gran interés por la formación de los profesionales. Sviridov; con el plan de acción para hacer frente a las nuevas tecnologías.
Aunque fue después de la II Guerra Mundial cuando se registra una verdadera explosión documental, destacamos en este período a Vannevar Bush, quien prepara un plan para que el esfuerzo en investigación repercuta en una mejora de las condiciones económicas, sociales y de bienestar de las personas; quiere contribuir a una mejor organización de la información almacenada en archivos y bibliotecas ideando también por su parte un sistema muy parecido a lo que hoy conocemos como Internet y fundando la Information Retrieval (Recuperación de Información). MEMEX fue una de las mayores ideas que nos dejó Vannevar Bush.
http://t.co/WuSbxGpyEn nuestros días disponemos de grandes avances para organizar, administrar, archivar y disponer de forma rápida y eficaz de cuanta información necesitamos. Quizás lo que ya se empieza a cuestionar es que si tal cantidad de información de la que disponemos es realmente verdadera o fruto de un mundo demasiado imaginativo que a veces prefiere vivir fuera de la realidad.